Lo que inició en el año 2000 como un proyecto familiar se convirtió en un espacio de hospedaje, recreación y recogimiento espiritual. Nacimos con el vigor del nuevo siglo y la esperanzadora expectativa del presente milenio.
Gracias a la topografía del “Valle del Diamante”, delimitado su perímetro por montañas que nos dan protección, gozamos de un exclusivo micro clima y la grata sensación de estar en un lugar exclusivo e inspirador, este valle se ubica en la reserva protegida de la sierra de Zapalinamé.
Nuestras instalaciones ofrecen estadía en cabañas para hospedar desde dos hasta ocho personas, dormitorios privados en los que pueden descansar hasta catorce personas y una confortable área de “Glamping”, con dormitorios totalmente equipados.